Las grosellas negras y las fresas son bayas que tienen un sabor y aroma agradables, por lo que son adecuadas para preparar diversas bebidas para el invierno. Pero se pueden combinar entre sí, ya que la acidez del primero puede diluir idealmente la dulzura del segundo. Por lo tanto, la compota de grosella negra y fresa es siempre la primera en desaparecer y es del agrado no solo de los adultos, sino también de los niños. Puedes cocinarlo de varias formas. Cada uno de ellos tiene determinadas características que hay que estudiar para elegir la receta más adecuada.
Selección y preparación de ingredientes
Para preparar la compota para el invierno, debe usar bayas maduras, pero no demasiado maduras, es decir, deben conservar su forma y tener una consistencia elástica. Su preparación debe realizarse por separado entre sí.
Las grosellas negras deben clasificarse, todas las hojas y los pecíolos deben eliminarse. Luego, las bayas deben verterse en un recipiente de plástico, llenarse con agua y lavarse. Después de eso, las grosellas negras deben transferirse a un colador para verter el agua.
Clasifique las fresas por separado, retire todas las frutas arrugadas y podridas. Después de eso, debes quitar las colas. Y luego lava las fresas y tíralas también en un colador para escurrir el agua restante.
Debe cerrar esta sabrosa bebida para el invierno en recipientes de vidrio con un volumen de 1 litro o más. Deben lavarse a fondo, enjuagarse con agua y cocinarse al vapor durante diez minutos. Esta etapa preparatoria no se puede ignorar, ya que la duración del almacenamiento adicional de la bebida en invierno depende de esto. Las latas de un litro se pueden esterilizar en el microondas en cinco minutos.
¡Importante! Las fresas deben lavarse rápida y cuidadosamente para que no pierdan su forma y se vuelvan demasiado acuosas.Cómo cocinar compota de grosella negra o roja y fresa para el invierno.
Una bebida preparada de acuerdo con esta receta clásica será una verdadera bendición en invierno, cuando el cuerpo carece de vitaminas.
Ingredientes requeridos:
- grosella negra - 500 g;
- fresas - 500 g;
- azúcar - 100-200 g;
- agua potable - 3 litros.
Proceso de cocción:
- Disponga las bayas en frascos esterilizados para que ocupen al menos 1/3 del volumen del recipiente.
- Hervir el agua por separado en una cacerola esmaltada.
- Vierta el líquido caliente en frascos de bayas hasta el borde.
- Cúbralos con tapas y déjelos durante 20-30 minutos.
- Durante este tiempo, las bayas liberarán jugo y el agua adquirirá un hermoso tono rico.
- Pasado el tiempo, escurrir el líquido en una cacerola, llevar a ebullición nuevamente.
- Agregue azúcar, revuelva hasta que se disuelva por completo y hierva durante 1-2 minutos.
- Vierta los recipientes con el almíbar resultante y enrolle las tapas.
Los bancos deben ponerse boca abajo y cubrirse con una manta. De esta forma, deben reposar hasta que se enfríen por completo.
¡Importante! La cantidad de azúcar en la bebida debe ajustarse a su gusto.
Receta de compota de grosella negra, fresa y arándanos
Los arándanos, como las grosellas negras con fresas, contienen una gran cantidad de vitamina C, así como E y grupo B. Por lo tanto, la combinación de estos tres tipos de bayas ayudará a compensar la falta de componentes útiles en la estación fría.
Ingredientes requeridos:
- 500 g de grosella negra;
- 250 g de arándanos y fresas;
- 10 cucharadas l. Sáhara;
- 3 litros de agua potable.
Proceso de cocción:
- Coloque las bayas preparadas en frascos para que ocupen 1/3 del volumen total del recipiente.
- Hervir agua en una cacerola aparte.
- Agregue azúcar al líquido, revuelva hasta que se disuelva por completo y hierva durante tres minutos.
- Vierta los frascos por encima con el almíbar resultante.
- Cúbralos con tapas.
- Coloque el material de algodón en 2-3 capas en el fondo en una cacerola ancha.
- Coloque las latas llenas en el recipiente.
- Vierta agua tibia en una cacerola hasta que llegue a las perchas del recipiente.
- Esterilícelos durante 15 minutos.
- Una vez transcurrido el tiempo, enrolle las tapas.
- Voltea los recipientes con la compota boca abajo y cúbrelos con una manta hasta que se enfríen por completo.
Si no hay arándanos frescos disponibles, se pueden reemplazar con frutos secos. Pero antes de preparar la bebida, las materias primas deben colocarse previamente en agua tibia durante 2-3 horas para restaurar el volumen de la fruta. Luego, el proceso de cocción se lleva a cabo de acuerdo con el esquema estándar.
¡Importante! Durante la esterilización, el frasco no debe entrar en contacto con el fondo de la sartén, de lo contrario podría romperse.
Receta de compota de fresa con hojas de grosella
Para preparar una bebida deliciosa, aromática y saludable para el invierno, puede utilizar no solo los frutos de la grosella negra, sino también las hojas de este arbusto. Después de todo, los tiempos de maduración para este tipo de bayas son diferentes, por lo que no siempre es posible comprarlas en el momento adecuado.
Ingredientes necesarios para 1 litro de pieza de trabajo:
- 200 g de fresas;
- 900 ml de agua potable;
- 100 g de azúcar;
- 5 piezas. hojas de grosella negra.
Proceso de cocción:
- Vierta las bayas en un frasco.
- Ponga encima hojas de grosella negra bien lavadas con agua fría.
- Hervir agua en una cacerola aparte.
- Vierta el frasco en la parte superior con agua caliente.
- Tapar y dejar actuar durante 30 minutos.
- Durante este tiempo, el agua adquirirá un tono brillante y absorberá el aroma de las hojas de grosella negra.
- Pasado el tiempo, escurre el líquido en una cacerola, agrega el azúcar y revuelve hasta que se disuelva por completo.
- Hervir el almíbar durante 2-3 minutos.
- Viértalo en un frasco, enrolle la tapa.
Al finalizar la cocción, voltee el recipiente boca abajo y cúbralo con una manta o manta hasta que se enfríe por completo.
¡Importante! Además, se obtiene una compota sabrosa y aromática combinando grosellas negras y fresas con hojas de cereza y frutos de cereza.
Cómo cocinar compota de grosellas y fresas en una olla de cocción lenta.
Puede simplificar significativamente el proceso de preparación de compota para el invierno a partir de grosellas negras y fresas con una multicocina. En este caso, también debe preparar previamente los ingredientes, esterilizar los frascos y luego comenzar a cocinar.
Productos requeridos:
- 500 g de bayas;
- 200 g de azúcar;
- agua potable.
Proceso de cocción:
- Coloque las bayas preparadas en un recipiente multicocina.
- Espolvorear con azúcar, mezclar suavemente.
- Llenar con agua hasta el nivel máximo.
- Configure el modo "Sopa" o "Cocción" durante 20-25 minutos.
- Después de que suene la señal sobre el final de la cocción, vierta la compota en frascos esterilizados, enrolle las tapas.
Cuando termine, ponga los recipientes boca abajo y cúbralos con una manta tibia. Dejar en esta forma hasta que se enfríe por completo.
¡Importante! Puede agregar una pizca de canela molida, cardamomo o jengibre para agregar un sabor más sabroso a la bebida.
Términos y condiciones de almacenamiento
Es necesario almacenar la compota de bayas en invierno en una habitación oscura, excluyendo la luz solar directa. Puede ser una despensa o un armario, y lo mejor de todo, un sótano, una logia acristalada.
La temperatura óptima es de + 5-20 ° C. Pero con una protección prolongada, no se deben permitir cambios bruscos en el régimen de detención. La temperatura debe bajar o subir gradualmente.
La vida útil de la compota de bayas cuando se guarda en la casa es de 12 meses, y en el sótano, el doble. Al agregar cerezas o cerezas a la compota, no puede almacenarla durante más de un año.
¡Importante! Es imposible almacenar esta bebida en la cocina en invierno, ya que el aire caliente de la estufa puede provocar hinchazón de las tapas y daños.Conclusión
La compota de grosella negra y fresa es una bebida deliciosa que puede recordarte los días de verano durante la estación fría. Sin embargo, todavía tiene enormes beneficios para la salud humana. La compota contiene componentes útiles que son necesarios para el funcionamiento normal de los órganos y sistemas internos. Por lo tanto, debe beberse especialmente en invierno y principios de primavera, cuando el cuerpo experimenta una aguda falta de vitaminas.