Obtener una cosecha abundante de fresas de alta calidad no es fácil. Los jardineros experimentados usan muchos de los trucos más inesperados para esto, entre los cuales se puede destacar un método tan efectivo como el procesamiento de fresas con amoníaco en primavera.
¿Cuáles son las ventajas del método y cómo hacerlo usted mismo?
Lo que es
El amoníaco es una solución acuosa de amoníaco; a la venta puede encontrarlo en varias concentraciones: una solución al 25% y una solución al diez por ciento. Para las fresas, el amoníaco es una fuente de nitrógeno, que no es inferior en esta calidad a la ceniza de madera, por ejemplo.
La principal ventaja del uso de amoníaco en la agricultura es la ausencia de impurezas acompañantes capaces de asentarse en los órganos de las plantas cultivadas, lo que es una garantía de seguridad tanto para las plantas como para las personas que cultivan cultivos y los comen.
¡Importante! El amoníaco para las fresas es una forma de cultivar no solo abundante y sabrosa, sino también una cosecha respetuosa con el medio ambiente.
Procesamiento primario
El primer tratamiento de las fresas con amoníaco debe realizarse a principios de primavera, el momento ideal para esto será la primera década de abril.
Este tratamiento tiene como objetivo destruir los agentes causantes de enfermedades fúngicas: las esporas de hongos invernan en el suelo, su actividad comienza después de que el sol calienta el suelo. Para evitar esto:
- Se prepara una solución a razón de 40 ml de amoníaco al diez por ciento por 10 litros de agua.
- Para que el amoníaco utilizado para las fresas no se evapore demasiado rápido, se agrega un litro de solución de jabón a la solución resultante, que, creando una película, ayuda a fijarla en la masa verde.
Paralelamente al hecho de que regar las fresas con amoníaco combate los microorganismos dañinos, esta solución enriquece el suelo con nitrógeno y contribuye al desarrollo de una masa verde saludable.
Procesamiento posterior de fresas
El siguiente tratamiento de fresas con amoníaco se lleva a cabo después de 2-3 semanas para destruir las plagas y patógenos restantes. Para ella necesitas:
- prepare una solución más concentrada, sin agregar una solución de jabón (se disuelven 60 ml de amoníaco en un balde de agua);
- los arbustos se rocían con esta solución y el suelo se arroja;
- Además, cuando llega el momento de la formación de flores y frutos, no hay necesidad de regar las fresas con amoníaco, porque durante este período la planta necesita más fertilizantes de fósforo y potasio, cuyo uso aumentará la calidad y cantidad de bayas.
La próxima vez que pueda usar este remedio para plantar fresas, podrá hacerlo después de recoger las bayas. Esto ya puede considerarse como alimentar a las fresas con amoníaco, para restaurar las plantas después de la fructificación y prepararlas para un período de inactividad. Para hacer esto, se diluyen 2 cucharadas de amoníaco en 10 litros de agua y se agregan 5 gotas de yodo, un antiséptico natural, que está diseñado para destruir focos de enfermedades fúngicas.
El uso de amoniaco para las fresas en primavera es una prevención eficaz de plagas como pulgones, osos, gusanos de alambre, hormigas. Además, el amoníaco es una fuente de nitrógeno nutricional, su introducción mejora el desarrollo de la masa verde, aumenta la cantidad de flores formadas, fortalece la inmunidad de la planta, aumentando su resistencia a enfermedades y plagas.
¡Importante! Agregar amoníaco debajo de las fresas elimina la acumulación de nitratos en frutas, hojas y raíces, ¡aumentando así la calidad y los beneficios de las bayas!
Medidas de precaución
Lo más importante a tener en cuenta es que no debe preparar una solución de trabajo para alimentar fresas con amoníaco en habitaciones cerradas. El amoníaco tiene un olor acre y con el contacto prolongado del amoníaco con las membranas mucosas de la nariz y la nasofaringe, puede producirse una quemadura. No puede utilizar esta solución para tratar plantaciones en invernaderos e invernaderos.
Antes de comenzar a trabajar, debe ponerse guantes, la ropa debe cubrir las áreas más grandes posibles de la piel, para que el amoníaco no entre y cause quemaduras.
Sin embargo, si esto sucediera, el lugar de contacto con el amoníaco debe enjuagarse inmediatamente con agua fría corriente, y si aparece un enrojecimiento severo en la piel, debe consultar a un especialista.
Conclusión
La alimentación de fresas con solución de amoníaco se puede atribuir a los remedios caseros, pero, a pesar de cierta originalidad y simplicidad, este método tiene un buen efecto.
Y lo más importante, elimina el uso de otros fertilizantes nitrogenados, mejora la calidad de las bayas, ayuda a lograr el objetivo principal de la jardinería privada: cultivar alimentos saludables y saludables que no contengan impurezas ni compuestos químicos residuales. Pero ahora, cuando es imposible decir completamente lo que contienen los productos que compramos, vale mucho.